sábado, 6 de octubre de 2012

Uno mas uno nunca me dio dos.


Ayer no podía dormir por tu presencia, y hoy porque  ya no estás. Es extraño como la gente sale y entra de tu vida sin molestarse si quiera en enseñar el pasaporte, sin dejar una fianza para los posibles daños creados a causa de ilusiones fallidas. Es extraño como dejas de echar de menos para echar de mas, o como entiendes que la frase "no te das cuenta de lo que tienes hasta que lo pierdes" es una de las mayores verdades dichas por el jodido ser humano. Que yo no se si te echo de menos o de mas, si necesito tu olor para poder dormir o es mi cama que se queja por el puto frío con cada amanecer. O mis manos, que se habían olvidado ya de desabrochar unos botones que no fueran los tuyos. O mis sabanas que ya tenían ganas de hacer la función que últimamente hacían tus brazos. O el sol harto de que cerrara las persianas y no le dejara entrar para intentar que nuestra noche fuera eterna. Yo no se que es, de menos o de mas, pero lo que se es que nunca se me dieron bien las matemáticas, ni si quiera sumar uno mas uno, nunca me ha dado dos.